MERCADO LABORAL: OCUPACIÓN Y SALARIOS - II TRIMESTRE 2014



1. Salarios recortados

La devaluación de la moneda –en sus dos prescripciones: la homeopática del último trimestre de 2013 y la dosis concentrada de enero de 2014- tuvo un impacto muy notable en el salario, habida cuenta de su rápido traslado a precios (ver sección inflación). El gráfico 4 expone la evolución del poder adquisitivo del salario así como la medición de éste en dólares al cambio oficial, siempre considerando a los empleados “en blanco” del sector privado de la economía.[16] El retroceso en las mismas dista de ser despreciable. En junio de 2014, el poder de compra del sueldo medio se ubicó un -8,6% por debajo del que caracterizaba a junio de 2013. Esta rebaja está implicando retrotraer el salario real al junio de 2010. La caída del salario medido en dólares es aún más abrupta: la baja interanual está en el orden del 14,4%. El promedio de esta variable en la primera mitad de 2014 está un 17,2% por debajo que en enero-junio del año pasado.[17]

Gráfico 4. Evolución del salario real y del salario medido en dólares (empleados registrados en sector privado). Mensual (01/12=100), ene/12-jun/14

2. Suba de la desocupación a 7,5%... ¿o estaría aproximándose al 10%?

El INDEC difundió la información proveniente de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) sobre el mercado laboral en el segundo trimestre de 2014. La primera nota distintiva es la suba de la tasa de desempleo abierto, que se incrementa respecto del mismo trimestre del año previo de 7,2% a 7,5%; por su parte, el subempleo retrocede de 9,7 a 9,4 puntos porcentuales (siempre calculados sobre la PEA. La “población con problemas de empleo” (como se suele denominar a la suma de desocupados y subocupados, que estaría retrocediendo en alguna décima según el INDEC) afecta, estimativamente sobre el total de la población urbana del país, a alrededor de 2,85 millones de personas (cifra equivalente a 2,14 veces la cantidad de habitantes de la ciudad de Córdoba, gráfico 5).

Gráfico 5. “Población con problemas de empleo” (desocupados + subocupados) estimada para el total de la población urbana del país, expresadas en ciudades de Córdoba.* II trimestre de 2014.

* La ciudad de Córdoba tiene 1.329.000 habitantes de acuerdo al Censo 2010

Fuente: Elaboración GERES en base a INDEC.

Sin embargo, el dato más destacable es la evolución de la tasa de actividad, que baja a su mínimo histórico (44,8% de la población) desde que existe la EPH. Dada la realidad de que la EPH es uno de los sectores del INDEC más fuertemente intervenidos, este desempeño sorprendente se presta a la suspicacia sobre la credibilidad del dato de desempleo. Esto es así porque la diferencia entre un desocupado y una persona inactiva (ambos comparten el hecho de que no trabajan) es la declaración del primero en el sentido de que ha buscado activamente trabajo. Si hay mala intención, un desocupado se “convierte” en un inactivo sencillamente cambiando una casilla de un excel. Lo que se encuentra analizando los datos es que la EPH II-2014 es representativa de una población urbana de 26.552.000 personas, cuando la del mismo trimestre de 2013 lo era de 26.328.000; esto es, 224.000 adicionales.[18] Sin embargo, se puede estimar que la cantidad de ocupados bajó de forma apreciable, en 170.000 individuos, lo que intuitivamente proyectaría un avance fuerte del desempleo… que sólo está sumando escasos 12.000 individuos. Los números sólo cierran con un grotesco crecimiento de 372.000 personas inactivas. La inactividad absorbe al parecer casi la totalidad tanto del crecimiento poblacional como de las personas que pierden su fuente de trabajo entre los segundos trimestres 2013/2014. Si se hace, a título de experimento, el cálculo de la desocupación para el segundo trimestre de 2014 manteniendo la tasa de actividad en el mismo porcentaje que un año atrás, la tasa de desocupación se computaría en el 9,4%.[19]

No solamente el descrédito del INDEC vuelve razonable la suspicacia que apuntamos, sino también la ausencia de explicaciones sobre el motivo que supuestamente está haciendo descender la tasa de actividad. ¿Los salarios en el país han crecido tanto en este plazo que permiten ahora que los hogares mantengan más gente sin trabajar, en calidad de amas de casa, estudiantes? No, como se ha mostrado en este apartado el sueldo está bajando ¿los 600 pesos del plan Progresar logran masivamente que jóvenes se vuelquen full time al estudio? Esto sería algo milagroso por lo reducido del monto. GERES sólo ve dos opciones razonables: mayor “desaliento” (desocupados que se rinden y dejan de buscar trabajo ante la falta de perspectivas, o personas que pierden el empleo y no salen a buscar inmediatamente) o adulteración lisa y llana de los datos.

 

3. Destrucción de puestos de trabajo

Los datos de la EPH indican a las claras un descenso en el número de ocupados. Utilizando los datos del informe de EPH del segundo trimestre de 2014 (considerando los datos corregidos por la información del Censo 2010) se puede estimar que la cantidad de ocupados baja en alrededor de -170.000 personas, cosa especialmente alarmante en un marco en que la población de referencia de la encuesta se incrementa en casi 224.000 (cuadro 6).

Cuadro 6. Ocupación en total de aglomerados EPH, segundos trimestres. 2013-2014.

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Fuente: Elaboración GERES en base a EPH-INDEC.

Debe consignarse, por otra parte, que la EPH considera datos para un conjunto de aglomerados en los que residen solamente 26,5 millones de argentinos. Si expandimos al total del país (urbano) el dato, tomando el coeficiente que usualmente emplea el MECON para ello, podría estimarse –provisoriamente y como aproximación, pues el Ministerio aún no actualiza sus cálculos- el descenso de la ocupación en 247.000 personas.

 

4. La tasa de argentinos desesperados por el desempleo

Desafortunadamente, al cierre de esta edición de informe de coyuntura GERES no estaba disponible ninguna base de datos EPH nueva para establecer el cálculo de los argentinos desesperados por el desempleo . La misma es una medición de GERES que intenta cuantificar la masa de argentinos en los que se expresan los más graves efectos de la existencia del desempleo: Los desempleados puros, los infraocupados (personas que sólo trabajan 12 horas a la semana queriendo trabajar más), los ocupados “carne de cañón” (ocupados que trabajan más de 30 horas a la semana por un sueldo ínfimo –menos de 1.723$ del último trimestre de 2013- y los desocupados “desalentados”. Estos se computan en dos versiones, siendo los “A” los inactivos que afirman no buscar empleo porque “se cansaron de buscar” o “hay poco trabajo en esta época” (dos opciones del cuestionario de la EPH) y los “B” los que no buscaron en el período de referencia pero sí lo hicieron en algún momento de los últimos 12 meses. El gráfico 6 expone la evolución de este grupo durante los últimos dos años.

Gráfico 6. Población "desesperada por el desempleo" según componente, total país (urbano). Trimestral, I.12-IV.13.

Previo a la devaluación de enero, la población “desesperada por el desempleo” rondaba las 2,7 millones de personas. El avance de la desocupación posterior y el salto que indudablemente dio con el auge inflacionario el componente “carne de cañón” (el más importante de todos en términos cuantitativos), apuntan a un crecimiento de este cómputo con el correr de 2014.

 

 

 

 

[16] GERES no toma en estas mediciones a los salarios de los empleados no registrados o del sector público, puesto que considera que el INDEC los releva de una forma muy imprecisa, acaso intencionalmente distorsionada.

[17] Desde GERES interpretamos que es totalmente equivocada la visión que manifestó la Presidenta de la Nación en cadena nacional el 7 de agosto pasado, en la que afirmaba que los arreglos en paritarias eran de una cuantía que no se daba en otros lugares de la Tierra (se entiende, por lo positivos). Manifestamos especialmente nuestro desacuerdo en el énfasis en que la primera mandataria afirmó que quien no comparte su perspectiva no tendría “honestidad intelectual”. Nuestro análisis se nutre, en proporción fundamental y determinante, de información oficial. Y llega a conclusiones opuestas.

[18] Aquí GERES toma en cuenta el empalme que está haciendo el INDEC sobre la representatividad de la muestra en base a la información proveniente del Censo Nacional de 2010.

[19] Esto es, si aplicamos la tasa de actividad del segundo trimestre de 2013 (45,7%) a la población del II-2014, la PEA muestral sería de 12.134.264 personas (y no las 11.884.000 que consigna el informe del INDEC). Sobre esa PEA, si los ocupados son –como se registra- 10.994.000, los desocupados, calculándolos por diferencia, totalizarían 1.140.264 en lugar de los 890.000 computados. Este coeficiente desocupados/PEA es del 9,4%.