SECTOR PÚBLICO - I TRIMESTRE 2017



Los ingresos totales del gobierno nacional durante el primer trimestre de 2017 ascendieron a $ 467.700 millones, superando en un 41,2% a la ejecución del mismo período de 2016. Descontando alrededor de $37.000 millones que generó el blanqueo de capitales y otros ingresos extras, se verifica que la recaudación impositiva genuina sigue mostrando un débil crecimiento (+27%interanual), casi 6 puntos por debajo de la inflación promedio calculada por GERES. Esta dinámica negativa, en términos del poder de compra de los recursos del Estado, es atribuible a la caída del consumo y a la reducción de impuestos en concepto de derechos de exportación y ganancias.

Por su parte, al finalizar el mes de marzo, la ejecución del gasto primario acumuló $ 509.000 millones, registrando una suba de +35% respecto a igual período del año anterior. Asimismo, los intereses de la deuda sumaron otros $ 49.600 millones (+64,4%), por lo cual el gasto total ascendió hasta $ 558.600 millones, un 37% más que en el primer trimestre de 2016.

En cuanto a los principales factores que explican la variación del gasto, se destacan los aumentos por encima de la inflación de rubro intereses de la deuda pública (+64,4%), jubilaciones y pensiones (+41,6%) y el mayor impulso de la obra pública, que registró un aumento de +37,2% durante el primer trimestre y +44% interanual en el mes de marzo. Por el contrario, el aumento de las tarifas de los servicios públicos (electricidad, gas y agua) resultó la principal medida para ajustar (en términos reales) el gasto en subsidios, que pasó de representar un 10% del gasto primario durante el primer trimestre de 2016 a un 7% durante igual período del presente año. Con esta tendencia, y luego de los ajustes de tarifas previstos para después de las elecciones, los subsidios bajarían de 4,3 puntos del PBI en 2016 a 3 puntos en 2017.

De este modo, la ejecución acumulada del primer trimestre de 2017 arrojó un déficit primario de $ 41.000 millones (-10% interanual) y un déficit financiero de $ 91.000 millones, lo que arroja una suba de casi 20% con relación a igual período del año anterior.

Respecto al déficit fiscal, se observa que el estancamiento de la economía y su impacto en la recaudación impositiva es un elemento clave para entenderla persistencia y dificultades para reducir el rojo fiscal, que resulta en gran medida endógeno al ciclo económico. En un marco donde el poder adquisitivo del Tesoro nacional se deteriora, el mantenimiento de un sendero de gasto público constante en términos reales y el creciente peso de los intereses de la deuda se traduce en un aumento del déficit financiero.

Asimismo, el Gobierno nacional tiene la posición de financiar, tanto el déficit primario en pesos como los vencimientos de capital e intereses de la deuda, haciendo uso del crédito externo en moneda extranjera. Enel primer trimestre de 2017, las colocaciones de deuda en moneda extranjera alcanzaron hasta USS 14.716 millones(incluyendo USS 7.716 millones de LETES)y otros $ 130.000 millones se emitieron en moneda nacional. La mayor emisión se realizó en el mes de enero, cuando se obtuvieron USS 7.000 millones en el mercado internacional, a una tasa promedio del 6,3% anual.

Por su parte, si sumamos los USS 32.486 millones de Títulos Públicos y LETES emitidos en moneda extranjera durante 2016, se obtiene que se emitieron USS 47.202 millones (solamente en moneda extranjera) durante los primeros 15 meses de la nueva gestión de gobierno.

Asimismo, durante los meses de abril y mayo se emitieron alrededor de USS 9.000 millones en ese mismo tipo de moneda y, según consta en el Decreto 334/2017 de fecha 15 de Mayo, las Secretarías de Hacienda y Finanzas de la Nación están autorizadas a emitir nueva deuda por la suma de hasta USS 20.000 millones en el mercado internacional en lo que resta del año.

Como sucedió en otros momentos históricos, el notable aumento de la deuda pública no ve reflejado en una expansión de la inversión estatal. De este modo, el gobierno compromete una parte creciente del presupuesto en el pago de intereses de la deuda sin que exista, en el presente, una expansión de la capacidad productiva que permita saldar los futuros vencimientos con los frutos del crecimiento económico. Los números son elocuentes. Entre 2015 y 2017 (presupuesto), los intereses suben de $ 120.800 millones (9% del gasto primario)a $ 256.000 millones (11% del gasto primario), mientras que la inversión pública pasa de $ 160.900 millones (11% del presupuesto) a $237.000 millones (10%) en igual período.

Asimismo, en relación al producto bruto interno, la participación de los intereses se duplica en el lapso de solamente cuatro años: pasa de un 1,3% del PBI en 2013, a 1,6% en 2014, 2,1% en 2015, 2,3% en 2016 y 2,6% en 2017; mientras que la inversión estatal baja de 2,5% a 2,2% del PBI durante igual período. Por su parte, el mayor endeudamiento externo también se refleja en la mayor participación de los intereses en moneda extranjera, que pasaron de representar un 45% del total en 2015 a un 53% en 2017.

Cuadro 9. Sector Público No Financiero. Base caja. En millones de pesos.

Fuente: Elaboración GERES en base a Ministerio de Hacienda y Finanzas

 

 

1.               Ingresos

La recaudación de impuestos acumulada al 31 marzo de 2017 totalizó $ 431.100 millones, superando a la ejecución de igual período de 2016 en un 38,2%. Como se comentó anteriormente, sobre este resultado incidieron los $37.000 millones extras provenientes del Régimen de Sinceramiento Fiscal ya que, como se observa en el cuadro siguiente, muchos de los principales gravámenes (como el impuesto al valor agregado y ganancias) crecieron por debajo de la evolución de los precios.

Cuadro 10. Sector Público Nacional. Ingresos Tributarios - En millones de pesos

Fuente: Elaboración GERES en base a Ministerio de Hacienda y Finanzas

El impuesto al valor agregado, exhibió un aumento del 19% durante el primer trimestre del año. Cabe advertir que el pobre desempeño en la evolución de este impuesto se debe esencialmente a las mayores devoluciones pagadas a los exportadores e reintegros a los productores de granos que, de niveles prácticamente nulos durante 2016, se incrementaron a casi $6.000 millones durante los primeros meses de 2017. Asimismo, la evolución del componente interno (IVA-DGI) aumentó un 33,8% (en línea con la inflación) debido a las mayores ventas en términos nominales y el IVA-DGA se incrementó apenas un 16,0% interanual.

En lo que respecta Ganancias, la variación durante el cuarto trimestre fue del 13,9%, casi veinte puntos por debajo de la inflación en igual período. La caída en términos reales se debe a la suba del mínimo no imponible y a las menores retenciones practicadas sobre las remuneraciones de las personas físicas.

En relación a los derechos de exportación, la recaudación cayó un 15,5% durante el primer trimestre del año. Esta evolución obedece a las fuertes liquidaciones en concepto de exportación de granos practicada a principios del año pasado (y base de comparación). En efecto, contemplando la composición de las exportaciones se observa que el rubro cereales y oleaginosas liquidó divisas por U$S 6.084 millones durante el primer trimestre de 2017, un 10% menos que en igual período del año pasado.

Por último, los recursos originados en los Aportes y Contribuciones a la Seguridad Social registraron una variación interanual del 37,7% durante el primer trimestre del año. El aumento de esta fuente de recursos se explica principalmente por las actualizaciones nominales de salarios, ya que la cantidad de cotizantes al sistema de seguridad social no mostró variaciones significativas respecto a igual período de 2016.

2.               Gastos

En cuanto al gasto primario, la ejecución acumulada durante el período de enero-marzo de 2017 ascendió a $ 509.000 millones, un 35% de aumento con respecto a igual período del año anterior y levemente por encima de la evolución de los precios. En la dinámica se observa una mayor recomposición de los gastos de capital, que se expandieron un 37,3% durante el primer trimestre, y un fuerte ajuste en los subsidios corrientes, luego del fuerte aumento aplicado en las tarifas de los servicios públicos.

En lo que respecta a la evolución de la masa salarial, durante el primer trimestre de 2017 los recursos destinados a los sueldos de los empleados públicos nacionales totalizaron $ 74.600 millones, elevándose un 31,9%respecto a los tres primeros meses de 2016. Dicha variación se encuentra en línea con la recomposición de las escalas de los principales convenios del personal civil acordadas el año pasado, que significaron aumentos nominales del 7% en junio, 10% en julio y 14% en el mes de agosto de 2016, y que tienen pleno impacto en los niveles salariales del primer semestre de 2017.

Por su parte, el acuerdo paritario firmado por el gremio UPCN y el gobierno nacional prevé para este año un aumento del 20% entres tramos: 5% en junio, 5% en julio y 10% en agosto. Los últimos acuerdos paritarios firmados a la baja respecto a la inflación y el estancamiento en los niveles de ocupación en los distintos organismos del gobierno nacional indican que la masa salarial perderá alguna participación en la estructura del presupuesto.

En jubilaciones y pensiones se gastaron $ 213.100 millones, un 41,6% de aumento interanual. La variación se explica por la actualización de los haberes conforme a la ley de movilidad, cuyos últimos índices de actualización fueron de 14,16% en setiembre de 2016 y de 12,96% en marzo de 2017, quedando el haber mínimo en $6.395 a partir de este último mes. La diferencia entre la recomposición de los haberes y el aumento del gasto obedece a la implementación de la Ley de Reparación Histórica Nº 27.260 que, según la información del ANSES, ajustó en alrededor de $ 2.000 promedio los haberes de 895.000 jubilados que accedieron a los beneficios de esta ley hasta abril de 2017.

Por su parte, las transferencias corrientes totalizaron $ 142.800 millones durante el primer trimestre del año, lo que representa un incremento interanual del 42,7%.

En cuanto a las transferencias a las hogares en concepto de asignaciones familiares, que según el presupuesto 2017 prevé la cobertura de 4.061.772 hijos de trabajadores asalariados y 4.188.322 coberturas de Asignación Universal por Hijo, totalizaron $ 35.900 millones y se expandieron un 55,2% durante el período que estamos analizando. Si bien para la actualización de estas prestaciones se utiliza el mismo criterio aplicado para las prestaciones previsionales (Ley Nº 27.160 ) y los últimos aumentos se encuentran por debajo de la evolución de los precios, como se comentó en el informe anterior, el aumento del gasto por encima de la inflación se explica principalmente por la ampliación de la cobertura a los hijos de trabajadores temporarios (+200.000 nuevos beneficiarios), hijos de monotributistas (+500.000) y a la suba del tope salarial mínimo para percibir el beneficio. Luego del aumento del 12,96% otorgado en marzo de 2017, el valor de la AUH se encuentra en $1.246.

Asimismo, las transferencias corrientes a provincias, totalizaron $ 16.800 millones (+134,3%) durante el primer trimestre. Los programas determinantes de esta variación fueron aquellos vinculados con la finalidad educación ($ 8.800 millones, +294%) y seguridad social ($ 2.000 millones, +401,4%). Entre los programas vinculados al financiamiento de gastos provinciales en educación sobresalen los recursos destinados al “Fondo Nacional de Incentivo Docente” que sumaron $ 4.400 millones durante el primer trimestre. Por su parte, los mayores desembolsos en concepto de transferencias destinadas al gasto en seguridad social provincial se explican principalmente por la restitución paulatina del 15% de los fondos coparticipables que injustamente la nación retenía – desde 1992 - a las provincias. Estos últimos recursos aportaron $ 1.600 millones extras a las cajas provinciales durante el primer trimestre del año.

Por su parte, los subsidios económicos se mantuvieron prácticamente constantes en términos nominales, pasando de $ 35.950 millones en el primer trimestre de 2016 a $ 35.900 millones en igual período de 2017. En el análisis de la ejecución según tipo de finalidad, se verifica que luego de las subas en las tarifas de gas y electricidad, los subsidios a la energía cayeron de $ 18.800 millones en el primer trimestre de 2016 a $ 14.700 millones en 2017; mientras que la postergación de la suba en los pasajes de trenes y colectivos implicó que los subsidios corrientes al transporte subieran de $ 16.900 millones en 2016 a $ 19.800 millones en 2017. A partir de esta dinámica se prevé que el gasto total en subsidios económicos se reduzca de 4,3% del PBI en 2016 a un 3% en 2017.

La contracara de la reducción (en términos reales) del gasto público en subsidios, resultó el fuerte incremento en las tarifas de los servicios públicos, que aportó un impulso adicional al aumento general de precios y afectó el poder adquisitivo de la población, en un contexto donde el consumo interno todavía no muestra señalas de recuperación. Con respecto a la evolución de los distintos cuadros tarifarios, según la información oficial, el ajuste en la factura media de gas natural por redes fue de un 200% en octubre de 2016, 24% en abril de 2017 y se prevé la aplicación de un nuevo aumento de 32% a partir de noviembre de 2017. En relación a la electricidad, considerando las variaciones del precio mayorista, las subas promedio fueron de 256% en febrero de 2016, 25% en febrero de 2017 y 60% en marzo de 2017; por último, en la ciudad de Buenos Aires y los 18 municipios del conurbano, la tarifa de agua subió entre216% y 375% a partir de abril de 2016 y otro 23% a partir de mayo de este año.

Asimismo, Las Transferencias a Universidades Nacionales subieron de $ 12.900 millones en el primer trimestre de 2016 a $ 18.900 millones entre enero y marzo de este año.

Finalmente, el Gobierno nacional desembolsó $ 51.400 millones en gastos de capital durante el primer trimestre, esto es una suba del 37,3% con respecto a igual período del año anterior. Los mayores desembolsos en obra pública se registraron en los programas vinculados a vivienda y urbanismo ($ 11.100 millones, +228%), transporte ($ 13.400 millones, +67%) y agua potable y alcantarillado ($ 4.900 millones, +65%).